Los restaurantes que están transformando la escena gastronómica de Bacalar

En palabras del chef Ricardo Mendez, este restaurante ofrece gastronomía contemporánea mexicana con influencias de otras gastronomías y eso se nota desde la técnica de los platillos hasta los emplatados. Desde risottos sofisticados hasta tostadas de una ejecución impecable, aquí hay algo para cada tipo de paladar. El chef recomienda probar la tostada Macario, que se sirve con pesca curada, jitomate deshidratado, mayonesa ahumada, salsa macha y cremoso de aguacate.

Este restaurante, ubicado dentro de Makaabá Hotel Boutique, es, en palabras del director general del hotel, Allan Patiño, “cocina de origen inspirada en técnicas ancestrales con insumos locales de nuestro huerto para tener un concepto farm to table“. Así, el restaurante ofrece una experiencia ancestral, arraigada a la cultura local. ¿Qué comer en Waah? Si vas a desayunar, pide unos chilaquiles negros con castacán o cochinita pibil. En la tarde, el pavo de patio en mole blanco es tu mejor opción.

Creación del chef Rodrigo Ovidio, Nixtamal es un concepto de slow food que, en palabras del chef, muestra un despliegue de “cocina mexicana de autor, a la leña”. Así, el elemento básico de la tendencia slow food, el fuego, se convierte en protagonista de una serie de platillos, que van desde los cortes de carne hasta los vegetales, y que se convierten en el punto focal de una experiencia ambiental casi mística. Cuando vayas, no te pierdas la langosta Nixtamal, una pieza entera marinada con ajo, mantequilla y cítricos, acompañada con camote al romero, queso de cabra y vegetales al grill.

Para Carolina Uribe, propietaria de este lugar de cocina mexicana contemporánea, Jaguara surge ante la poca oferta de comida mexicana que hay en Bacalar: “aquí hay mucha comida de playa, casual, que está rica, pero que no ponía en alto la gastronomía que hay en México”. Así, Jaguara ofrece un menú que eleva la cocina de la zona y la marida con coctelería y mezcales de calidad. Aquí, lo indispensable son las flautas de jaiba con mole coloradito.

Bajo la dirección del chef Pedro Sánchez, este restaurante, ubicado en el hotel Mía Bacalar, ofrece una experiencia culinaria descrita como gastronomía mexicana de vanguardia. La belleza de su menú radica en que puede ofrecer cosas tan simples como un aguachile o una pizza, y elevarlos con ingredientes que rinden homenaje a la gastronomía tradicional, en un concepto farm to table. Desde cortes de carne hasta mariscos, la oferta es muy variada. Sin embargo, hay que probar la tostada de pulpo y el ceviche de camarón estilo Mazatlán, servido con aguacate al grill y espuma de coriandro.

No todo lo que vale la pena comer en esta nueva era gastronómica de Bacalar es mexicano, y Patio de Aguacate es prueba de ello: “Patio de Aguacate es un restaurante de amigos y familia que ofrece una fusión de comida mexicana y argentina. Queremos encontrar sabores al paladar de ambos países”, explica Bruno Coleoni, propietario del lugar. Para él, la clave del lugar es la diversidad de sabor y el producto local. ¿Su platillo imperdible? Aunque la pizza es la especialidad, la milanesa napolitana es su recomendación: pechuga de pollo empanizada al estilo argentino con salsa, queso, rodajas de tomate, provenzal y papas fritas.