Los hoteles con el mejor brunch de Ciudad de México

Su nombre es un acrónimo de “zarandeado” y Nayarit. Entre semana sirve comida inspirada en ese estado del Pacífico mexicano pero los domingos de 12h a 6h entrega manjares de la cocina internacional en su afamado brunch. Ensalada thai, huevos rotos, chilaquiles de mole o fish & chips al estilo inglés son algunas de las opciones que lo demuestran.

La joya de la corona sin duda está en los hot cakes de estilo japonés con salsa caliente de avellana y crema de cacahuate. Como todo el mundo va con cometidos diferentes, hay paquetes que van desde no incluir bebidas alcohólicas hasta ofrecer champaña Louis Rederer ilimitada.

Condesa y Roma son dos barrios que imponen moda en la ciudad. Veracruz, calle que los divide, alberga el hotel Condesa D.F. En el edificio sede, construido en 1928, hay un hermoso patio que funciona como restaurante. Su —no tan original— nombre es El Patio y se especializa en fusionar las cocinas mexicana y francesa.

Los domingos se convierte en un hervidero de creatividad ya que el menú varía cada semana, dependiendo de los ingredientes disponibles. Lo que nunca faltan son el pan francés, los huevos benedictinos y las charolas de salmón, short rib y quesos. Otra constante: la primera mimosa está incluida.

Su base está en las cocinas peruana, mexicana y argentina, lo que otorga sabores especiales a sus platos. Los domingos es palpable en los ceviches, ensaladas, pizzas y pastas hechas en casa. Hay, además, una barra de mariscos con cangrejo, almejas y salmón.

Dos aspectos encantadores distinguen a este brunch de otros: la mesa de postres corre a cargo de la aclamada pastelería y dulcería artesanal Amado y hay una estación especial para que los más pequeños diseñen su propia pizza. Por si fuera poco, hay una cuidada selección de charcutería, quesos y carnes a los que vale la pena hincar un diente.

El tercer piso del hotel The St. Regis Mexico City es ocupado por Diana, restaurante que comparte nombre con la escultura de la monumental fuente que se observa desde sus ventanales. Desde hace años su misión es reinventar la cocina mexicana entre semana y los domingos consentir a sus clientes con un bufé con estaciones de ceviche, mariscos, sushi, prime rib y postres.

Al igual que en otros lugares, en Diana el brunch tiene distintos precios que dependen de las bebidas incluidas. Ya sea que venga en tu paquete o no, no te vayas sin probar la Sangrita María, bebida insignia de la casa que mexicaniza el tradicional Bloody Mary con mezcal y en vaso escarchado con sal de gusano de maguey.

Elige los ingredientes para que te preparen un ceviche o cóctel a tu gusto, prueba ensaladas hidropónicas y saborea rollos de sushi y láminas de sashimi fresco. Todo ello con la zona boscosa de Santa Fe enmarcando el cuadro. ¿No suena tentador?

Market Kitchen es el concepto experimental del Westin Santa Fe y los domingos intercala los sabores clásicos de la comida mexicana como el de la birria, las quesadillas o los chilaquiles, con ingredientes de las cocinas asiáticas.

El Cardenal, uno de los restaurantes de comida mexicana con más tradición en la capital del país, no ofrece un brunch que cumpla precisamente con los cánones de la palabra. Sin embargo, es una parada obligada para romper el ayuno ya sea temprano por la mañana o ya casi entrada la tarde.

Enchiladas verdes de cuitlacoche, aporreado, enchiladas de cochinita pibil y gorditas hidalguenses son algunas de las delicias que ofrece. Mi favorita, sin duda, es la tortilla de huevo con escamoles. Y no importa si eres del club de los que empiezan con algo dulce o de los que terminan con algo dulce, guarda espacio para una concha y una orden de natas y bájalo con un chocolate “Doña Oliva” . Después me agradeces.